Monday, December 17, 2012

El niño de 8 a 10 años


El niño de 8 a 10 años

A partir de los ocho años, los niños/as entran en la etapa de las operaciones concretas. Los niños avanzan  hacia niveles de razonamiento progresivamente, más complejos, intentando encontrar una explicación lógica a lo que ocurre.
Ya no les sirve cualquier argumento para resolver sus preguntas o dudas. Esta etapa se caracteriza por un pensamiento lógico, cuyos principios  más importantes son: la identidad
(un objeto sigue siendo el mismo aunque modifiquemos alguna de sus características), la reversibilidad  y reciprocidad( les  permite dar vuelta a la operaciones y entender que los diferentes problemas que se les plantean pueden   solucionarse compensando de alguna manera lo sucedido). 
Al principio, todavía se valen de referentes concretos (utilizar los dedos para contar,...), pero pronto prescinden de estas ayudas y desarrollan su capacidad de abstracción. Se da un rápido desarrollo de su capacidad para pensar. 
La Memoria y la Atención mejoran. Son capaces de estar más tiempo concentrados en una actividad y evitar las distracciones. El desarrollo de la Atención repercute en su capacidad de memorizar y recordar. Al estar más atentos, se fijan en la información más relevante y desarrollan estrategias que les permiten recordar mejor las cosas. La memoria empieza a ser más ordenada y eficaz. 
Son capaces de integrar diferentes informaciones o pensar en varias cosas al mismo tiempo. A medida que aumentan  sus conocimientos, aumentan también  sus habilidades para entender mejor todo lo que les rodea. 
Hasta los nueve años, se encuentran el Estadio de la Heteronomía, es decir, las normas les vienen de fuera, no las crean ellos, si no que son impuestas por los adultos. Consideran que las reglas son sagradas e inamovibles. En este sentido es importante que contribuyan en la construcción de dichas normas, explicándoles el por qué y para qué.
En la vida escolar atraviesan por un momento óptimo de cara a potenciar su capacidad  para la lectura y su interés por las ciencias, las matemáticas y el conocimiento de ellos mismos, de los demás y el mundo que les rodea. Por todo ello, es importante que aprendan la importancia de los valores internos. Los valores reflejan la personalidad de los individuos  y son la expresión del tono moral, cultural, intelectual, afectivo y social marcado por la familia, la escuela y la sociedad. Por eso es necesario que adquieran unas normas de comportamiento que les sirvan de referencia.
Además:
·        Necesitan  contar con la aceptación y aprobación de los iguales; no les gusta estar solos.
·        Disfrutan sintiéndose importantes y útiles. Les encantan las actividades grupales y excursiones.
·        Les gusta vestir, hablar y actuar como los compañeros; necesitan sentir su grupo.
·        Necesitan libertad para visitar solos a sus amigos.
·        Les gusta participar en los planes y actividades familiares.
·        Necesitan  la satisfacción de emprender las cosas y terminarlas.
·        Necesitan estar seguros del apoyo  y comprensión de sus padres.


Thursday, December 13, 2012

Principios de Maestro Modelo

Conoces los cinco principios de MCG basados en Deuteronomio 6:1-9? 






Wednesday, December 12, 2012

El niño de 6 a 8 años


El niño de 6 a 8 años

A nivel cognitivo
 Los niños / as de 6 a 8 años, se encuentran en el estadio de operaciones concretas, lo cual supone la necesidad de manipular (los objetos, el lenguaje,...) para alcanzar los conceptos que se proponen. Hacen girar la realidad en torno a su propia actividad e identifican y manejan símbolos y signos.
Poseen una inteligencia práctica, por lo que conocen a través de su experiencia personal y cotidiana, aunque evolucionan progresivamente hacia la lógica. Disponen de un pensamiento sincrético y analítico, percibiendo globalmente la realidad, estableciendo analogías sin realizar análisis y procediendo inductivamente.
Adquiere paulatinamente el pensamiento caudal, permitiéndose la separación entre el yo y el exterior, de cuyo contraste surgirá el nuevo conocimiento del entorno. Manifiestan interés por las cosas que le agradan. En general la atención y observación es inestable y persiguen el objetivo mientras dura el interés. Poseen una gran curiosidad intelectual, manifestándose en la llamativa pregunta del ¿por qué? a todo o casi todo. Son imaginativos, imitativos, curiosos e impacientes.
Evolucionan hacia la función de representación mental, llegando a la concepción de espacio y tiempo, de manera elemental y ligada a sus experiencias mentales y motrices. Dominan la percepción global y carecen del sentido de lo relativo, de la reflexión y de la autocrítica. Tiene gran subjetividad en sus planteamientos, conciben las cosas a su imagen y se consideran el centro de todo.

A nivel socio afectivo
 Se desenvuelven básicamente en la vida social, pues ya disponen de los hábitos necesarios para ella. Entienden y respetan las normas de convivencia. Amplían su proceso de socialización, relación y colaboración con los demás.
Responden bien a la emulación y evolucionan a posturas de autonomía moral, aunque fuertemente condicionados por la heteronimia moral marcada por los mayores. Presentan dificultades para tomar decisiones y son egocéntricos, individualistas e impositivos. Son bastantes sensitivos y no aceptan bien las críticas. Les gustan las cosas familiares y sienten necesidad de seguridad, de la aprobación del adulto. En la mayoría de sus acciones es indiferente el sexo y mezclan el mundo real con el mundo “mágico”.


 A nivel motor
 En este ciclo el desarrollo del esquema corporal y la estructuración espacio-temporal es el referente esencial a tener en cuenta. El niño / a  toma como punto de partida el conocimiento que tiene de las diferentes partes de su cuerpo, pasando del movimiento global al segmentario, y afirmando totalmente su lateralidad.
Empieza a tomar conciencia de su cuerpo pasando de la acción a la representación, tanto de su cuerpo como de su acción motora. Diferencia las partes que intervienen en el movimiento, obteniendo una mejor imagen de sí mismo.
Estas mejoras en la estructuración del esquema corporal permiten aumentar su competencia motriz, pasando de ser dominado por sus movimientos a dominar su motricidad. La interacción con el espacio, el tiempo, el movimiento propio y el de los demás son clave, siendo el proceso perceptivo un aspecto determinante al ser la base para el tratamiento de la información derivada de dichas interacciones.
En la medida que conozcan y afiancen hábitos que favorezcan la utilización de su cuerpo, desarrollarán una correcta actitud corporal que beneficie su crecimiento.
Es característico del ciclo, desarrollar las habilidades y destrezas básicas (correr, saltar, trepar, reptar, lanzar,...) de forma global y a través de formas jugadas, lo que va favoreciendo la mejora de las capacidades coordinativas y del equilibrio.
Añadir a todo lo dicho hasta ahora que el cuerpo representa también un medio de expresión y comunicación natural para el niño de esta edad, siendo característica la espontaneidad para la imitación y simulación motriz